La primera imagen de la plaza de San Vicente, donde la muralla sobresale por una incipiente arboleda de centenarios negrillos la tomó Auguste Muriel en 1864, cuando realizaba para la Compañía de los Ferrocarriles del Norte un álbum de las localidades por donde pasaba el tren. La plaza “plantada de árboles que le dan un aspecto de un antiguo mercado” con un pequeño bosquecillo frente a la muralla, y así fue dibujada por el historiador y arquitecto inglés G. E. Street en 1865.
El Ayuntamiento de Ávila destinará este año más de cuatro millones de euros a actuaciones que se ejecutarán en la ciudad en el marco de la Estrategia de Desarrollo Urbano Sostenible e Integrado (Edusi) de Ávila.
Tiene como objetivo acercar a los autónomos, empresas y pymes los procesos de contratación, de los que estarán puntualmente informados mediante la suscripción a un boletín informativo en el que se publicarán los expedientes.

Al exterior del recinto amurallado se abre el paisaje y el campo abulense en una perspectiva invariable hasta pasados los últimos cincuenta años. En el espacio que rodea la ciudad murada desfilan los árboles alineados en los tesos de las rondas norte y sur, y en los espacios abiertos se agrupan haciendo plazas sombreadas y cambiantes en su aspecto según las épocas. Este es el caso del incipiente jardín de San Vicente, de la plaza del Mercado Grande, de la plaza de Nalvillos, del circuito o plazuela de San Pedro o plaza del Marqués de Novaliches y luego del Ejército, o de la plaza de Santa Ana.
